La medida de paralización de las obras ha llenado de satisfacción a todos los colectivos sociales que venimos denunciando la ilegalidad de las obras desde hace años y empieza a ser un atisbo de esperanza para el triunfo de la justicia y la defensa del medio ambiente. La orden del juez impide la continuidad de las obras y por lo tanto que el complejo hotelero pueda abrir sus puertas el próximo mes de abril como tenía previsto la promotora Azata, lo que supondría una mayor agresión al entorno natural en el que se construye el hotel.

Lamentamos por otra parte, la manifiesta irresponsabilidad del Ayuntamiento de Carboneras al conceder una licencia que ha dado lugar a la devastación de un espacio natural protegido y ha creado una situación de inseguridad laboral para los trabajadores que ejecutaban las obras.

Ponemos de manifiesto y lamentamos igualmente, la pasividad y el escaso interés por la conservación del Parque Natural mostrado por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, que en este caso ha mostrado de forma tan escandalosa, eludiendo responsabilidades y evitando intervenir en un tema que le afecta de forma directa, al construirse el hotel en pleno Parque Natural de Cabo de Gata Níjar, en una zona protegida en la que no se permite construir según el vigente Plan de Ordenación de los Recursos Naturales.