Durante las últimas décadas muchos estudios se han centrado en el intercambio de gases efecto invernadero entre la atmósfera y la biosfera, especialmente en el intercambio de CO2. Hasta ahora se había estudiado ampliamente la influencia de los ecosistemas de zonas templadas del Norte de América y de Europa Central. El presente estudio, llevado a cabo en un espartal semiárido situado en el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, ha demostrado la gran importancia de la ventilación subterránea motivada por el viento. Hasta ahora se desconocía que la salida de aire cargado de CO2 desde el subsuelo a la atmósfera cuando el suelo está muy seco, fundamentalmente en verano y en días ventosos, envía al aire grandes cantidades de dióxido de carbono.
Los investigadores mantienen que esta gran emisión de Co2 no puede ser debida a la actividad biológica del ecosistema, puesto que se trata de una zona con escasez hídrica y limitación de nutrientes que provocan que la actividad biológica de microorganismos, animales y plantas sea muy baja. Asociación Amigos del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar |