Hessel trata asuntos políticos y sociales de hoy en día, basándose en la experiencia de una larga y compleja vida. Analiza y expresa lo que piensa con una idéntica visión de la justicia, la libertad y la igualdad.
Llama la atención su análisis sin dividirse en persona privada de un lado y persona política por otro. Estamos tan acostumbrados de ver las ocurriencias con diferentes ojos, segun donde pasan, si en la vida personal o en la pública, y solemos interpretarlo dividiendonos en persona privada o política, que el texto de Stéphane Hessel nos puede llevar a sentir que es justamente esta división la que nos bloquea.
Recuerdo el tiempo en que viviamos según el principio de que lo privado era político y no acceptamos su división. Parecia que estos tiempos habían pasado para siempre, pero, de repente, viene un señor muy mayor y los revitaliza.
También es impresionante la cantidad de reacciones en los medios de comunicación que ha provocado ¡Indignaos!. Parece que inspira a intelectuales y conlleva un saludable efecto tonificante.
Un reportaje sobre el autor y su libro en un programa de la televisión alemana concluye con el presentador preguntando: “¿Perdón, pero realmente tenemos que dejarnos explicar el mundo por un hombre de noventa y tres años?” Y el mismo presentador contesta: “¡Sí! si es Stéphane Hessel”
Cita de la página 31 de ¡Indignaos!
“La indiferencia: la peor de las actitudes.,Es cierto, las razones para indignarse pueden parecer hoy menos nítidas o el mundo, demasiado complejo. ¿Quién manda?, ¿quién decide? No siempre es fácil distinguir entre todas las corrientes que nos gobiernan. Ya no se trata de una pequeña élite cuyas artimañas comprendemos perfectamente. Es un mundo vasto, y nos damos cuenta de que es interdependiente. Vivimos en una interconectividad como no ha existido jamás. Pero en este mundo hay cosas insoportables. Para verlo, debemos observar bien, buscar. Yo le digo a los jóvenes: buscad un poco y encontraréis. La peor actitud es la indiferencia, decir “paso de todo, ya me las apaño“. Si os comportáis así, perdéis uno de los componentes esenciales que forman al hombre. Uno de los componentes indispensables: la facultad de indignación y el compromiso que la sigue.”
Lisa Frohn
Colabodora del equipo de redacción del Eco del Parque |