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Xavier de Torres

Oh! Tierra desconocida
donde he pasado, como de visita
la mitad de mi vida.
Esta tierra que domina el mar
y oprime el desierto
hasta sus mínimas raíces imperecederas.

  Soñé al llegar a ella
que algún día entendería
la profundidad de sus secretos.
Todo ese olvido que arrastra y
del que nadie recuerda
porque fue
Ahora que no hay piratas,
ni trogloditas, ni mujeres, ni hombres
vestidos de negro persiguiendo al agua dulce
o esquivando la sorberbia de Don quien fuese.

Ahora que tantos loan su existencia
Su “incomparable marco”
La cristalinidad de sus aguas
Su camapari,gin tonic o mojito
en cualquier bar…
su propio apartamento
y cuanto lo disfrutan…,
Mientras la tierra, esta tierra,
sigue olvidándose de su propio olvido
que convierte en ancestral
cualquier mirada sincera
que no desee arrebatarle nada.
Foto:Taller de Xavier de Torres, San José © OM
 

Como me duele la arena
y el viento que la sopla.
Como me duele que revienten su silencio.
Que la asalten
con la excusa de un futuro,
que promete más olvido.
Veo quejarse al invierno por las esquinas
Y desplazarse tanta humedad salina
como si fuese una sombra,
que regresa siempre a por sus lágrimas
dejándolo todo frío y tan abandonado
como sus cientos de casas vacías, vacías, vacías.

Uno ya no sabe cual de sus sombras es más oscura.
Si la que viene como un fantama del pasado o
la que se acerca renqueante, escandalosa con cara de futuro.
Ardiendo con la luz, como una mariposa,
cada verano en el que se vive a codazos,
donde siempre lo que sobró fue soledad.
Todos somos reos.
Unos de sueños
Otros de sus quimeras y
algunos más de esa penitencia
que siempre resulta un misterio.
Cosiéndote a ese olvido
como si fuese una inviolable amistad
a la que no queda más remedio que adherirse
y de la que nadie se jacta mientras pacta.
Cruzando el umbral del tiempo
…cuando el tiempo vuelve a quedarse solo y
nadie intenta hacer de él, lo que no es.
Un sigilo de luz
renace en mi interior.
Se abstraen los hechos cuales fueran.
Se disipan los trajines ajenos a estas atmósferas.
La arena regresa a su reloj de arena.
Los barcos cruzan mercantiles los mares y
el horizonte vuelve a ser
un motivo, una inspiración,
un relato inabarcable.
Llegan otros pájaros,
que cantan otras canciones y
el hombre recuerda a otros hombres,
que se fueron y parecen regresarse de nuevo
para escuchar sus propias voces.
Para revivirse viviendo
en estos lugares, que solo ellos comprendían…
Hoy lo sé !
Lugares en los que eran capaces
De sonreírle sin miedo y de cara
al olvido.
No se les hizo justicia
Jamás tampoco la pidieron
Eran solo, hombres que vivían
En “un aquí” toda su vida.
Frente al mar. En el desierto.
Con su palomo, sus migas y sus raíces.
Viendo al extranjero como extranjero.
Ofreciéndole su mano,
Una mano labrada, seca como la tierra y
amiga o enemiga, exactamente como lo era su mar y su desierto.
Que nadie diga, que el mar no es de nadie.
En ese mar descansan muchos muertos con su voz,
con sus intrasferibles voces dulces o terribles.
Casi mejor, que no les de por hablar.
Nunca se sabe…
Que velocidad toma el viento
cuando habla de la mar.


Foto: Taller de Xavier de Torres, San José © OM
 
En el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar estos indicadores en general alcanzan un alto nivel de cumplimiento, algunos con un 100%, pero suspende con un 33% de cumplimiento el indicador de zonificación.
Las reservas de la biosfera cuentan con tres zonas diferenciadas e interrelacionadas que se complementan y refuerzan entre sí. Estás zonas son las denominadas núcleo, tampón y transición.
• Zonas núcleo: se componen de un ecosistema protegido que contribuye a la conservación de los paisajes, ecosistemas y la biodiversidad. Una reserva de la biosfera puede tener más de un núcleo. En ellos solo se permite la realización de investigaciones y otras actividades que no afecten a la conservación. En la zonificación del PORN, estas zonas vendrían a corresponder con las zonas A o reserva.
• Zonas tampón: estas zonas rodean al núcleo o son colindantes con él y contribuirán a su protección. En estas áreas se realizan actividades compatibles con la conservación, como la educación ambiental, el turismo ecológico y la investigación.
• Zonas de transición: son las áreas que se extienden hacia el exterior de la reserva de la biosfera. En ellas se permiten actividades para promover un desarrollo sostenible desde el punto de vista económico, ecológico, social y cultural. En ella se realizan actividades agrícolas, asentamientos humanos y otros usos.
La zonificación del PORN es la asignatura pendiente que viene arrastrando durante años el Parque Natural, ya que no satisface adecuadamente los requisitos establecidos para las mencionadas zonas de transición, tampón y núcleo que se establecen en una reserva de la biosfera. A priori no parece muy coherente que en la zonificación del PORN vigente existan zonas C colindantes con zonas A, lo que equivaldría a tener una zona núcleo sin una adecuada zona tampón, directamente en contacto con una zona de transición. Incluso se dan casos peores cuando nos encontramos zonas de reserva sin zonas tampón ni transición, son los casos en que las zonas A del PORN están en los límites del Parque Natural o incluso colindantes con un núcleo urbano, que recordemos que en el PORN vigente están excluidos (sorprendentemente) de la zonificación ambiental.
 
Foto:Taller de Xavier de Torres, San José © OM
 

Oh! Tierra desconocida
Cuantos sueños eran tuyos
Y yo no lo supe al llegar.
Jamás me mentiste y
yo no lo supe escuchar.
Te vas cada primavera
Tierra que te vas
Cuando regresa el otoño
me vienes de nuevo a buscar.
Qué quieres de mí, que nunca me lo preguntas ?
Qué quieres de aquellos a los que nunca ves?
Qué quieres de los inocentes ignorantes que no te tienen miedo y
vienen a jugar y entretenerse con lo que tú les das?
Qué quieres, en fín, de todos nosotros.
Que juntos apenas somos nada y
Apenas nada sabemos de ti.

Tierra de Levante
Tan inmersa en tú Mediterráneo.
En su concéntrico clima.
En su vasto horizonte.
Neurona africana, vestida de orientes remotos.
Paraíso de infieles al recuerdo.
Infierno ansioso de oteadores sin huida.
Tierra donde tantas gentes sencillas
lograron hacer crecer sus flores
junto a un mar que daba peces,
que iban comiendo bajo las higueras
junto a su postre a la sombra
de las sombras de la luz.

Estoico cabo de Gata,
que te resistes al olvido
sin dejar, en primera línea,
de luchar para olvidar.
Es así.
Una y otra vez
Llega el mar y se va.
Lo ves venir y lo ves irse
Sin preguntarte
Ni porque viene, ni porque se va.
Eres un cabo generoso.
No le preguntas a nadie porque viene,
Ni tampoco porque se va.
Tú única huida es el silencio
Y el ruido que el aire hace en el mar.
Hubo hombres, yo los ví,
que llegaron a ser como tú y
como tú en algún lugar están silencio.
Olvidados sin huir.
Cada roca es tú memoria.
Cada puesta de sol tú magia.
Cada amanecer tú voluntad.

Xavier de Torres
27 septiembre 2017
(Antes de ponerme, una vez más a pintar)

Seguí a una estrella,
como un rey de Navidad.
Y llegué a esta tierra,
como si fuese tan solo otro lugar.
Subí a su monte, que eran dos
Y caí desde lo alto
hasta que el mar me abrazó,
dejándome después sobre la arena,
donde crecí para ser pequeño
y ver cuan grande era mi hogar.
Llegué de otra tierra
Aquella que nunca olvido,
aunque llegué para olvidar y
ahora que regresan los recuerdos
comprendo
como es el amar desde el mar
como es dulce el desierto
cuando no te llega a secar.
Como todo lo verde es una esperanza
que el desierto siempre quiso olvidar
y el mar, a su vez convirtió en misterio
para no dejarla, de entre sus aguas, escapar.