Home
El Eco
Noticias
Juridico
Senderismo
Conocer
Planos y mapas
La Asociacion
Estatutos
Enlaces
Contacto
Casas rurales, hoteles, cortijos,
y otros servicios
en el Parque

Visita nuestros Patrocinadores
  Camisetas de la Asociación
Diferentes tallas, modelos y colores
Descúbrelas
y cómpralas
 
Síguenos en

Sitemap

Aviso legal
Política de cookies
Política de privacidad

Webdesign: espacioazul.net

 
 
 
 

El cernícalo

Foto: Cernícalo Vulgar

El Cernícalo Vulgar (Falco tinnunculus) es una de las aves rapaces que podemos observar en el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar. El cernícalo, de nombre fuerte y reducido tamaño, es el hermano pequeño de la familia de los halcones. El macho tiene la cabeza de color gris con líneas oscuras a lo largo, la cola es gris, la espalda y el resto de color castaño con conchas negras. La hembra es de color castaño con cochas negras en la parte superior. El cernícalo macho tiene de 70 a 80 cm de envergadura con una longitud de 30 a 35 cm y un peso de 140 a 250 gr. Las hembras son más grandes y llegan a pesar de 150 a 300 gr.

Estas mini rapaces se alimentan de pequeños mamíferos, aves, reptiles e invertebrados, a veces incluyen en su dieta peces y anfibios, si es necesario también pueden comer carroña, pero no es normal, ya que el cernícalo es un cazador de lo más experto. La temporada de cría empieza en primavera, anidando y poniendo sus huevos hacia el mes de abril. Anidan en huecos de árboles, en grietas de rocas, en otros nidos abandonados, etc; poniendo sus huevos sobre el suelo o acomodándolos con algunas hojas. Suelen poner de tres a seis huevos. La hembra incuba los huevos de 26 a 31 días, mientras es alimentada por el macho.

Es fácil oírlo desde lejos con su gritito chillón y verlo en los acantilados, patrullando nuestras tierras con su vuelo nervioso o flotando en el aire sin moverse hasta que divisa una pieza de caza y se deja caer en picado. Es un cazador valiente y fuerte, que se atreve con animales bastante más grandes que él. Este bello halconcito de nombre casi insultante, está bastante extendido en esta zona y sus colonias estables no tienen, de momento, peligro de extinción.

Pero, si algún día, por suerte, divisamos un cernícalo más pequeño de lo normal, con un tono rojizo en su espalda y las patas amarillas, no creamos que es uno de nuestros cernícalos que se ha quedado canijo por culpa de los parásitos, estaremos viendo un Cernícalo Primilla (Falco naumanni), más raro de ver en estas tierras y, como su propio nombre indica, familiar muy cercano de nuestro simpático Cernícalo Vulgar.

Mariano Torrero