Una vez al año se organiza a nivel internacional unas jornadas de limpieza del litoral del mar Mediterráneo denominadas "Clean Up the Med" (Limpiemos el Mediterráneo). Este pasado fin de semana se han limpiado simultáneamente sectores de costa desde Málaga hasta Chipre, pasando por Francia, Italia, Grecia, Líbano, Malta o Turquía.

Uno de los principales problemas para la conservación de los ecosistemas marinos es el vertido de basuras  desde el mar o en el litoral. Los residuos no biodegradables, se acumulan en el fondo marino o sobre la costa. La basura marina la componen muchos fragmentos sólidos de nuestros desechos, ya sean vidrio, metales o plásticos, que acaban en el mar. Este problema de la basura marina empeora de manera constante. El mayor daño que produce es él que no se ve, afectando a las comunidades marinas por contaminación difusa. Cada año millones de aves, tortugas marinas, peces y mamíferos marinos ingieren plásticos al confundirlos con alimento o indirectamente desde el sedimento. Uno de los peores contaminantes son los residuos plásticos, que los animales pueden ingerir por confusión y que les producen la muerte por bloqueo de su aparato digestivo  o se ingieren por los invertebrados acumulando metales pesados.