Por la escasa pluviosidad y un suelo arenoso con muy poca retención de agua, a este entorno le correspondería un tipo de vegetación de menor porte y aspecto más xeromórfico del que presenta este azufaifar. Sin embargo, el enorme desarrollo de las raíces pivotantes de los azufaifos, capaces de alcanzar el nivel freático, les permite mantener su actividad fotosintética en el verano, la época, aquí, más desfavorable del año, diferenciándose de las distintas estrategias adoptadas por otras especies a este clima2. Al abrigo de esta forma semiesférica cubierta de hojas, muchas especies consiguen mejores condiciones de humedad y temperatura para su establecimiento y desarrollo. En invierno sin embargo pierde sus hojas, dejando pasar la luz que aprovecharán aquellas plantas que se encuentren en su interior, como el cambrón (Lycium intricatum), esparragueras (Asparagus sp.), salaos (Salsola oppositifolia), el oroval (Whithania frutescens), el manto de la virgen (Fagonia cretica), etc.

También, multitud de invertebrados, aves como el alcaudón, mamíferos como el conejo, el lirón careto, etc., encuentran su hábitat en estas formaciones. Las ramas espinosas y zigzagueantes de los artos forman un inexpugnable refugio y sus hojas y frutos son un nutritivo alimento para ellos; incluso hay una mariposa (Tarucus theophrastus) cuyas larvas se alimentan exclusivamente de sus hojas.

El azufaifo cuenta con poblaciones en el Norte de África, llegando hasta la península arábiga. El azufaifar de Amoladeras constituye un referente en cuanto a su conservación. En el PORN del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, la zona tiene la figura de Área de reserva terrestre, para preservar su estado, y las formaciones de azufaifos se encuentran incluidas como hábitat prioritario en la Directiva Hábitat.

Entre las amenazas de este enclave estuvieron en el pasado la intensa extracción de arenas para uso agrícola que dejaron desprotegidos a muchos individuos, hoy en día con menor porte y más castigados por el viento.

Actualmente hay otras amenazas sobre las poblaciones, como la sobreexplotación, salinización y contaminación de los acuíferos, que debilitan y pueden provocar la muerte de una parte de los azufaifos, especialmente los más alejados del nivel freático.

Entre las medidas adoptadas para su protección se incluyen los vallados de los principales caminos de la zona, únicas vías por las que se puede transitar.

La colaboración de todos, visitantes, agricultores, administración, etc., es necesaria para poder conservar este enclave único en el continente europeo.

Jardín Botánico El Albardinal
Red Andaluza de Jardines Botánicos y Micológico en Espacios Naturales.
Consejería de Medio Ambiente. Junta de Andalucía.

Notas:
1. El azufaifo también es conocido en la comarca como arto, nombre que se da en otros lugares a Maytenus senegalensis, arbusto espinoso no caducifolio con cierto parecido, pero de presencia puntual en el Parque. En ocasiones se distingue entre arto blanco (Z .lotus) y arto negro (M. senegalensis). En la zona levantina también se le conoce como jinjolero.
2. En climas semiáridos encontramos especies que tienden a reducir su actividad durante el periodo estival, perdiendo la hoja (malacófilas), permaneciendo en forma de semilla (terófitos), resistiendo gracias a órganos subterráneos de reserva (geófitos), etc.