El medio ambiente es el entorno en el que desarrollamos nuestra vida. Todos hemos oído hablar del grave deterioro que está experimentando el planeta y también sufrimos las consecuencias de ello: polución, restricciones de agua, pérdida de calidad de vida… Ante el reto ambiental, debemos asumir nuestra responsabilidad y conocer las posibilidades que tenemos para protegerlo y mejorarlo. En este contexto nace este primer artículo sobre buenas prácticas en el litoral, que presentamos con vocación de que tenga continuidad en siguientes números del Eco. Las buenas prácticas se definen “como un conjunto de recomendaciones practicas, útiles y didácticas que sirven para modificar o mejorar los comportamientos personales habituales, ofreciendo alternativas de fácil comprensión”.
Las buenas prácticas ambientales son medidas que se toman para minimizar el impacto negativo de una actividad, con el objetivo de:
• Contribuir a cambiar comportamientos y/o hábitos que resulten negativos para el funcionamiento general de la biosfera.
• Proporcionar información práctica, fiable y actual sobre las posibilidades reales de mejorar la situación ambiental.
• Facilitar la comprensión de los procesos ambientales unidos a nuestras acciones cotidianas.
Mediante la implantación de buenas prácticas ambientales se pretende conseguir:
• Reducir el consumo energético.
• Reducir el consumo de agua.
• Disminuir la generación de residuos y facilitar su reutilización.
• Minimizar el efecto medioambiental de las emisiones atmosféricas, los ruidos y los vertidos a las aguas.
• Mejorar la competitividad de las empresas mediante:
- La racionalización y el ahorro de recursos naturales y del consumo de materias primas, energía y agua, lo que representa un descenso en los costes.
- La mejora del control de los procesos y de la eficiencia en el desarrollo de las actividades.
- El conocimiento de las necesidades e inquietudes del cliente (usuario).
- Mejorar la imagen de las empresas ante los clientes, los usuarios y los trabajadores.
- Capacitar a los empleados, así como a los usuarios, mediante una correcta formación e información, lo que redundará en una buena integración de las medidas adoptadas para la mejora y el cuidado del medio ambiente.
Buenas Prácticas en la vida diaria
Todos, independientemente de nuestro trabajo, nuestra condición social e incluso de nuestra edad, podemos poner en marcha pequeñas acciones para mejorar el medio ambiente. Estas pequeñas acciones, que se transforman en grandes medidas respecto a su beneficio para el medio ambiente, son fácilmente aplicables en nuestra vida diaria con un poco de compromiso por parte de todos y todas:
1. Reduce, reutiliza y recicla lo máximo posible.
2. Consume la energía eléctrica necesaria, sin despilfarrar.
3. Separa tus residuos y llévalos al contenedor o Punto Limpio adecuado.
4. No utilices el automóvil cuando no sea necesario.
5. No emplees los electrodomésticos a media carga.
6. No uses indiscriminadamente el desagüe para deshacerte de tus
desperdicios.
7. El ruido también es una forma de contaminación. Intenta producir el mínimo posible.
8. Practica medidas de ahorro de agua.
9. No utilices productos agresivos con el medio ambiente.
10. Tus residuos peligrosos deben ser gestionados por una entidad autorizada.
Buenas Prácticas en el litoral
A continuación expondremos una serie de buenas prácticas ambientales dirigidas a distintos sectores de la población, tanto a usuarios de actividades que se realizan en la costa, como a trabajadores que realizan su labor en el entorno litoral (empleados de empresas turísticas, pescadores, operarios de playas, etc.). Son medidas básicas que nos pueden servir como punto de apoyo para crear otras más especificas, teniendo en cuenta la zona de influencia y al público al que van dirigidas.
Buenas Prácticas Ambientales en playas
Generalmente las playas y el litoral son considerados como un espacio de ocio y esparcimiento más que como un entorno natural, por lo que en muchas ocasiones el concepto de playa ideal que pueda tener el visitante no coincide con los valores naturales de esta. Las playas urbanas, generalmente muy bien valoradas por los turistas gracias a su accesibilidad y servicios, han pasado de ser un entorno natural a un espacio bastante artificial en el que:
• Desaparecen las dunas litorales y en su lugar encontramos paseos marítimos. De este modo no encontramos especies animales o vegetales propias de estos ambientes, ya que la limpieza de la arena con medios mecánicos impide el crecimiento de las plantas.
• No se permite que se acumulen restos de Posidonia oceanica en la orilla para evitar la erosión. Con objeto de “mantener limpia” la playa, se recogen los restos de Posidonia aumentando con ello la erosión, y alterando la dinámica natural. Actualmente, en muchos municipios se está cambiando esta costumbre y se establecen periodos, que suelen coincidir con los de menos afluencia de turistas a las playas, en los que no se retiran los arribazones, pues estos restos acumulados en la orilla constituyen una excelente protección ante la pérdida de arena de las playas.
• La preferencia de las playas de arena frente a las playas de cantos ha llevado a la desaparición de muchas playas de cantos en las que se ha introducido arena para atraer a mayor número de visitantes.
Si bien este tipo de decisiones se toman desde los ayuntamientos y aparentemente el usuario no puede hacer nada por ello, esto no tiene por qué ser así: el conocer por qué no deben de retirarse los arribazones de Posidonia, o por qué es mejor realizar una limpieza manual frente a una mecánica, o bien por qué los paseos marítimos tal y como los conocemos resultan perjudiciales para el medio natural, puede traducirse en que la demanda de este tipo de acciones (como la retirada de arribazones o la limpieza mecánica de playas en las inmediaciones de las dunas) sea cada vez menor y de este modo contribuyamos a la conservación del medio litoral.
A continuación detallamos una serie de actitudes que el turista de playa y costa puede poner en práctica para mejorar su relación con el medio ambiente. La playa es un espacio natural en el que tenemos que convivir con especies animales y vegetales de enorme interés ambiental.
¡RESPETA A LAS PERSONAS Y AL MEDIO AMBIENTE!
• Para acceder a la playa utiliza los accesos habilitados para tal fin.
- Observa el entorno, piensa cómo te gustaría recordarlo y encontrarlo. Es una obligación ciudadana mantener la playa limpia. Deposita tus restos en el lugar adecuado.
• Si no existen contenedores adecuados, recoge la basura y deposítala en el/los contenedores más cercanos.
• Las colillas son un gran problema, no por ser pequeñas se descomponen antes. Si fumas en la playa guarda las colillas (existen multitud de accesorios destinados a este fin) y, cuando te vayas, deposítalas en el contenedor adecuado.
• No malgastes el agua. Utiliza las duchas o lavapies únicamente durante el tiempo
necesario. Entre todos ahorraremos gran cantidad de agua.
• Si puedes elegir, opta por el lavapies frente a la ducha.
• Está prohibido el uso de cualquier jabón o detergente en el medio natural.
• Utiliza adecuadamente lavapies, duchas y baños, un uso responsable alarga la vida de los mismos. Piensa en los demás y en cómo te gustaría encontrarlos.
• Cumple las advertencias de las señales y la normativa litoral.
• Recuerda que no se puede acampar ni hacer fuego en la playa.
• Sé prudente y respeta el estado de la mar; sigue siempre las indicaciones de los equipos de salvamento y/o de las señales que regulan el baño.
• Las sustancias contaminantes, incluidos aceites de motor, baterías, etc., no pueden ser abandonados en cualquier lugar; son altamente contaminantes, su abandono en lugares no autorizados está absolutamente prohibido.
• El reparto de publicidad en playa, costa, cada vez es menos frecuente y en muchos
municipios es sancionable, no está permitido.
• Si practicas deportes náuticos o pesca, cumple siempre con su normativa.
• Es importante también conocer e informarse sobre las zonas de protección para el baño. Para garantizar la seguridad de los bañistas en playas urbanas se han establecido zonas de protección para el baño que generalmente están señalizadas con una línea de boyas y de las que mucha gente desconoce el significado.
Zona de baño: Esta zona está reservada a los bañistas y prohibida a todos los deportes náuticos. Se considera zona de baño la zona balizada (marcada por una línea de boyas). Si no está balizada ocupa la zona contigua de costa de una anchura de 200 metros en playas y 50 metros en el resto de costa.
Canales de entrada y salida: Prohibidos para el baño y destinados para dar acceso a la
playa a los usurarios de deportes náuticos (windsurf, esquí náutico, motos acuáticas, veleros, embarcaciones a motor, motos náuticas, etc.). Si no existe un canal establecido se deberá atravesar la zona de baño perpendicularmente a la línea de costa, con precaución y siempre a menos de 3 nudos. Además, está prohibido fondear en los canales de acceso a puertos, calas y playas (si están balizadas), y dentro de las zonas de baño debidamente balizadas.
• Evita que los animales domésticos accedan a las playas sueltos, salvo que se trate de zonas destinadas a ese fin. En estos casos evita que las mascotas accedan a las dunas, son ecosistemas muy frágiles.
• El ruido también es contaminación, un ruido molesto perjudica a los que están a tu
alrededor, es mejor escuchar los ruidos del entorno, olas, gaviotas...
• No arranques plantas, muchas de ellas son especies protegidas y su recolección está penada por la ley.
• No molestes a los animales que habitan el litoral. La recogida de animales vivos es una actividad que necesita licencia, en caso contrario es sancionable. Algunas especies están protegidas, sus poblaciones peligran en gran medida debido a estas prácticas.
• Evita las acciones que deterioran la calidad del agua del mar.
• En la orilla y al bañarse, respeta la fauna y la flora. No la apartes ni retires de su entorno natural.
• Al bucear, cuide del medio marino.
• Es muy interesante participar en campañas de medio ambiente, itinerarios ambientales, charlas, voluntariados, etc. El primer paso para conservar algo es conocerlo.
Como habréis podido observar la gran mayoría de las pautas que hemos expuesto en este articulo son de sentido común, que a veces parece ser el menos común de los sentidos.
Continuará…
Fuentes: Instituto de Ecología Litoral. Gestión sostenible de la Costa.
Karlos Mina
Director Técnico Subparke
karlos@subparke.com
www.subparke.com
|