El tiempo vuela y ya estamos en verano. Con el calor llega el nuevo Eco del Parque, con ganas de informar, reivindicar y seguir siendo el escaparate de la gente que quiere y defiende a este maltratado Parque.

Ya estamos hartos de hablar de lo poco que la Consejería de Medio Ambiente hace por nuestro entorno, y esta vez habíamos pensado dar un pequeño espacio a la esperanza, ya que con las elecciones autonómicas ha habido cambios en la consejería;  tratábamos de dar un pequeño margen para que los nuevos cargos demostrasen sus intenciones, pero no podemos esperar porque el nuevo PORN ataca, sin contemplaciones, a la línea de flotación del Parque, abandonando descaradamente la protección de playas, zonas de cultivo y núcleos urbanos. La canción del verano va a ser “Todos contra el PORN” . Aunque el paro crezca a nivel nacional, a nosotros no nos va a faltar trabajo, y a los juzgados tampoco.

En el gobierno también ha habido cambios y nos asusta un poco la inclusión del ministerio de Medio Ambiente en un macroministerio. Si bien englobar medio ambiente, pesca y agricultura es algo que tiene su lógica y podría acercar entendimientos y soluciones para muchos problemas, la experiencia nos dice que los macroministerios tienden a abarcar mucho y apretar poco, corriendo el riesgo de diluir los temas importantes para el medio ambiente en un mar de intereses económicos y laborales para los sectores primarios, con quien comparte ministerio. Veremos en qué queda el asunto.

Pese a que cada día salen más sentencias en su contra, el alcalde de Carboneras se ha puesto en pie de guerra defendiendo el macrohotel ilegal con uñas y dientes, azuzando violentamente a sus leales súbditos contra todo el que critique la animalada perpetrada en El Algarrobico. De momento la bandera negra no se la quita ni Dios y, después, la historia pondrá a cada uno en su sitio y, si es justa, a más de uno lo pondrá a la sombra, que es donde debe estar.

Pero eso no es todo, aún tenemos más noticias malas este verano. Un pequeño local de Rodalquilar echa el cierre, dejando un hueco enorme que no será fácil de llenar. “La Fiebre del Oro” se despide dejando una trayectoria impresionante, en el recuerdo de los amantes del arte y la cultura; y un regusto amargo, de impotencia e incomprensión, en la memoria de sus impulsores. El Eco no puede contener las lágrimas, al ser portador de esta triste noticia.