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HAZ EL INDIO ESTE VERANO Y CÁRGATE DE ENERGÍA
Bailar como un loco alrededor de la hoguera, tocar las maracas o el tambor, cantar viejas canciones de la niñez bajo la luz de las estrellas… Imita el modo de vida de los indios norteamericanos que te deslumbraban de niño en las películas y recupera toda tu energía interior. ¿Quién ha dicho que hacer el indio no sea útil? Las costumbres de las tribus de indios norteamericanos, que de pequeños nos dejaban con la boca abierta, tienen un gran poder curativo. Sus danzas alrededor de la hoguera, sus noches tranquilas en torno al chamán del poblado, escuchando música o las viejas historias de los antepasados, sus rituales a la hora de maquillarse y vestirse para las grandes fiestas, todo ello tenía el poder de sanar sus cuerpos y sus almas, e infundir a los guerreros valor, energía, intuición y sabiduría que les llevaban a actuar de forma certera ante la vida. Aquí te proponemos algunas de sus técnicas que podrás practicar en el Parque, a cielo abierto.
- Tocar el tambor: el ritmo de este instrumento ayuda a entrar en un estado de conciencia sereno. El sonido de este instrumento imita los latidos del corazón y por tanto facilita nuestra conexión con la respiración lo cual nos aporta más oxígeno y calma. Los indios creían además que la percusión en general y los tambores en particular propician la aparición de imágenes sanadoras.
- Acúnate: tumbado con la mano derecha sobre el corazón y la izquierda sobre la derecha piensa en tus propias virtudes y habilidades. Concentrarse en el propósito de desarrollar la autoestima. Al valorarte a uno mismo se despierta el amor que hace nacer al sanador interno. Pon una música suave y tararea la melodía como si te cantases una nana.
- Los principios sanadores de los indios norteamericanos consistían en: llevar una dieta equilibrada, practicar ejercicio diario, reservar tiempo para divertirse, jugar y reír; escuchar música por la noche; tumbarse a la luz de la hoguera o de las estrellas y contar historias de los antepasados o de la naturaleza; sentir contacto físico con otras personas, mediante la práctica del masaje o de la danza en grupo; y cultivar su conexión con las fuerzas de la naturaleza, el viento, los ríos, los animales, el canto de los pájaros, etcétera.
- Animales de poder: los sanadores de las tribus aborígenes están vinculados en general a los cuadrúpedos, renos, ciervos, caballos, vacas, etc. Visualizar las imágenes de estos animales al despertar o acostarte o estar en contacto con ellos te ayudará.
Gloria Garrido
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