Paseo ornitológico por el Parque Cabo de Gata
El Parque Natural Cabo de Gata-Níjar tiene una gran biodiversidad, su principal característica es la aridez, que no significa que no haya vida, sino que, pese a la ausencia de agua, hay una gran variedad de ecosistemas, quizá más que en otras zonas más húmedas de nuestro país. Aquí apenas hay árboles, pero hay muchas especies vegetales de pequeño y mediano tamaño, la más significativa y emblemática es el palmito.
En cuanto a las aves, una de las especies que podemos observar con mayor frecuencia es la cogujada, de tonos pardos fácilmente distinguible por su cresta.
Podemos ver abubillas, camachuelos, colirrojos, collalbas, estorninos, tórtolas, todas estas aves están en zonas áridas, algunas, como las grajillas, ligadas a la actividad humana. Con un poco de suerte, veremos algún ave que viene de África, como el corredor sahariano o la collalba desértica. Esporádicamente, podemos ver algún cernícalo o algún mochuelo en búsqueda de alimento e incluso algún águila perdicera ya que el Parque es su zona de campeo. Durante el periodo migratorio podemos encontrarnos con alguna sorpresa como avutardas o grullas.

Foto: Cernícalo vulgar © José Rivera Menéndez
Cuando llegamos al sur nos encontramos el humedal de las Salinas de Cabo de Gata, auténtico paraíso ornitológico, donde las especies más visibles por su tamaño son los flamencos. De menor tamaño encontramos avocetas, cigüeñuelas, aunque también hay aves más pequeñas, sobre todo limícolas como correlimos y chorlitejos, entre los que se encuentra el chorlitejo patinegro, especie amenazada y cada vez más escasa. Si seguimos por la costa, llegamos a la desembocadura de Rambla Morales donde, además de las especies que se encuentran en las Salinas, podemos ver en su época, patos como el malvasía, cuchara, porrones o tarro blanco y si tenemos suerte podemos ver también garzas, martinetes, garcillas y garcetas.
También hay aves marinas como la gaviota patiamarilla, la gaviota de Audouin con el pico rojo, negro y amarillo, que cría en la isla de Alborán y está en peligro de extinción, y la gaviota picofina, entre otras muchas.

Foto: Cogujada común © José Rivera Menéndez

Foto: Avoceta común © José Rivera Menéndez
En las zonas que antiguamente se cultivaban había perdices y ganga ortega, que en sus tiempos servían como alimento a la población local, lamentablemente la pérdida del cultivo tradicional en secano ha supuesto la pérdida de ejemplares de estas especies hasta llevarlas prácticamente a su desaparición. Otras aves esteparias como la alondra ricotí, que hace no mucho tiempo era observable en zonas más naturales, prácticamente han desaparecido, quedando en la actualidad una o dos parejas en todo el Parque. La ausencia de arbolado en la estepa hace que las aves aniden en el suelo, por lo que están sometidas a una fuerte depredación y a la presión humana. Así que, si paseamos por el Parque, hay que ir con mucha precaución y caminar solamente por senderos. Si llevamos perro, este debe ir con correa.
Pero toda esta riqueza está en peligro debido al exceso de presión humana, ampliación de los núcleos urbanos, construcción de edificaciones en suelo no urbanizable, generalmente para hoteles, nuevos caminos e infraestructuras y gran presión turística en determinadas épocas del año. Hay que tomar conciencia de estos problemas y actuar en consecuencia, si queremos que esta biodiversidad actualmente en peligro se siga manteniendo.
Asociación Amigos del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar
EL PARQUE
Noticias
Conoce el Parque
Fotografías
Patrocinadores
CONTACTAR
Hazte socio/a
Formulario de contacto

