Viaje literario por el Parque

En este viaje literario os presentamos una estampa veraniega de Esther Morillas (Jaén, 1968), profesora en la Universidad de Málaga, inspirada por la población de Las Negras.

Hasta ahora, Esther Morillas ha publicado tres poemarios, participado en varias antologías y tiene en preparación su último libro con el título Lo uno y lo otro.

Insisten las chicharras escondidas,
envidiosas: empieza el canto alguna
y las demás la siguen. Miro el mar
que corta el horizonte, aún se ve,
y los cubos de casas, un molino
habitado y feliz, tambor en alto.
Van ganando los días, todo en calma,
postal nueva en mi álbum de recuerdos:
Almería, Las Negras, mes de julio.

Foto: Molino de las Negras © Oscar Molina

Se trata de una estrofa de nueve versos endecasílabos que invita a la reflexión, pese al sencillo y delicado motivo que la poeta retrata en ellos.
Sí, están los elementos naturales como el mar, el paso del tiempo, pero sobre todo el silencio y el vacío, interrumpido por esas chicharras insistentes, “envidiosas”, que se ahogan por el calor.
Es precisamente esa música, esa irónica melodía estridente la que acompaña el tiempo y a la poeta no le molesta porque contempla el mar y su horizonte, es, por tanto, una sensación introspectiva en tres planos: el auditivo, el visual y el contemplativo, resuelto en los tres últimos versos: “todo en calma”, “postal nueva en mi álbum de recuerdos” y la rúbrica de la certeza espacio-temporal “Almería, Las Negras, mes de julio”.

Foto: Las Negras © Oscar Molina

Por este verso final no estamos ante una estrofa clásica, la octava real, que invitaba a la meditación, pero este mismo es el que cierra el cuadro y enmarca el poema, destacando los valores de la localidad: casas cuadradas, molino feliz “tambor en alto”.
Este perfecto endecasílabo representa la data que se suele escribir detrás de la fotografía, para identificar e inmortalizar el instante.

Con todos estos detalles configura la postal para el recuerdo inolvidable de unos días de verano en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar.

Miguel Galindo
Colaborador del equipo de redacción del Eco del Parque

Share This