Vida natural

Caminar, un ejercicio perfecto para mantener la salud

Caminar es el ejercicio más sano y natural que existe, no solo para la salud del cuerpo sino también para la mente. El senderismo hay que practicarlo con las debidas precauciones, siendo aconsejable llevar un kit de emergencias.

No es novedad decir que el ejercicio físico es necesario para la salud. Caminar puede considerarse como el ejercicio perfecto porque es sencillo, gratuito, conveniente, no requiere ningún equipo o entrenamiento especial y se puede hacer a cualquier edad. 

Un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Sídney confirmó que caminar a un ritmo rápido reduce en un 24% el riesgo de mortalidad por cualquier causa, mientras que andar a un ritmo normal se asocia a una reducción de un 21%. 

Andando a un buen ritmo, se acelera el metabolismo y, con ello, se le ayuda a quemar las grasas, por lo que es uno de los mejores ejercicios para mantenerte en un peso equilibrado, además de aumentar la masa y el tono muscular. Caminar durante 30 minutos disminuye la presión arterial durante 24 horas después del ejercicio. Además, la caminata hace que las válvulas del corazón trabajen más, mejorando la circulación y, por tanto, la oxigenación de todas las células del organismo. También estimula una mayor producción de insulina, sustancia que es responsable de la absorción de la glucosa por las células, por lo que es bueno para los diabéticos. Caminando se aumenta la densidad ósea, previniendo la osteoporosis, además de mantener la salud de las articulaciones ayudando a prevenir problemas como la artritis.

Foto: Caminando por el Parque © JMJH

Salud mental
Además, los neurocientíficos de la Universidad de Princeton creen que caminar regularmente puede incluso ayudar a regenerar el cerebro y a enfrentar mejor y con menos estrés los problemas cotidianos. Cuando se practica ejercicio se libera aún más una hormona llamada endorfina, que es responsable de la sensación de alegría y relajación, al tiempo que reduce la producción de cortisol, la hormona del estrés, por ello, ejercicio y caminar en particular, es una excelente terapia para la depresión y la ansiedad, a lo que ayuda también el hecho de sumergirse en un entorno natural, alejándose, literalmente, de la fuente del problema. Finalmente, pero no menos importante, al respirar aire puro se previenen muchas enfermedades respiratorias. Un aire de calidad y lejos de la contaminación de las ciudades hará que los pulmones se sientan mucho mejor.

Foto: Caminando por el Parque © JMJH

Precauciones
Pero, para disfrutar de sus ventajas, hay que practicar esta actividad con ciertas precauciones, como comenzar poco a poco, con pocos kilómetros e ir aumentando la distancia a medida que se va ganando resistencia.

Llevar el equipo adecuado según la actividad a realizar y el clima previsto, no faltando el agua en abundancia, repelente de mosquitos y protección para la piel y los ojos: sombrero de ala ancha y gafas que, además de filtro cromático, deben tener filtros ultravioleta y polarizador en caso de que se vaya a caminar a la orilla del mar para evitar los rayos reflejados en el agua y en la arena. Es conveniente ir siempre acompañado, a ser posible por quien conozca el lugar o informar a alguien dónde se va y el horario previsto de llegada.

Prepararse para lo peor. Lo más probable es que no pase nada, pero hay que estar preparado para posibles accidentes, por lo que, además de adoptar las precauciones debidas, es conveniente llevar al menos un pequeño kit de emergencia, si no uno por persona, sí para un grupo de personas. Es importante que esté a mano en la mochila y que sea fácil de identificar, no solo por quien lo lleva sino por cualquiera que en caso de emergencia tenga que localizarlo. A modo de ejemplo proponemos el contenido del botiquín que puede llevarse a una excursión en nuestro Parque.

Juan Manuel Jerez
Secretario de la Asociación Amigos del Parque

EL BOTIQUÍN DEL SENDERISTA

• Guantes estériles
• Tijeras y pinzas
• Esparadrapo de tela o plástico.
• Tiritas
• Paquete de gasas estériles
• Apósitos estériles
• Vendas de crepe y de gasa.
• Solución hidroalcohólica para lavado y desinfección de manos
• Toallitas de alcohol
• Antiséptico tipo clorhexidina
• Monodosis de suero fisiológico
• Bandas de papel de cierre de heridas
• Paquete de frío instantáneo
• Vendaje de emergencias (israelí) para hemorragias
• Pañuelo triangular
• Gel para quemaduras
• Manta de supervivencia
• Mascarilla para RCP
• Medicación bajo prescripción médica: Lápiz para picaduras y reacciones alérgicas o pomada antihistamínica. Analgésicos orales, tipo Paracetamol. Antihistamínico oral.
• En la mochila, es conveniente llevar una férula de SAM Splint y una venda cohesiva para inmovilización de miembros

Foto: El botiquín del senderista © JMJH

Foto: Componentes del botiquín del senderista © JMJH

Foto: Férula de Sam Splint y venda cohesiva © JMJH

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